martes, 16 de octubre de 2007

en esta esquina trato de, e incluso puedo

Es por cosas como este momento,
por estas manos que me sujetan para que pueda hundirme en tu pecho,
a la izquierda de todo,
y que no pueda entender que a pesar de todos mis todos
y de todos mis nuncas
sigues aquí, bostezando en mitad de esta noche,
y yo pueda cerrar los ojos sabiendo que después de toda esa sangre
y de esos miedos
estarás tú, bailando sobre la lluvia,
sosteniéndome como una nota caída en mitad de un pentagrama,
y no puedo entender que me prefieras así, despistado y perdido,
buscandome siempre,
más borracho que vivo
y que me des un beso en la cabeza y juegues a hacer garabatos con mi pelo,
y yo así, tan despeinado como tú me dejas,
llorando con esta mezcla de felicidad última
y de primera tristeza,
apeado de cualquier cosa que no sea el azar del siguiente minuto,
que me quieras de esta manera y no disimules mis nudos pacontra el mundo
y en lugar de eso sigas besándome las heridas
que yo solo me provoco
para decirte cosas, pa buscarme los motivos,
y que te sientes siempre en cada esquina,
conmigo,
mirándome como si este viernes tuviera un sentido que yo no le puedo dar,
y me digas que da igual, que este camino va a medias
y yo te miro
y te miro
porque no entiendo mucho de lianas a las que aferrarse
y sí demasiado de látigos
y de estribillos,
mientras me soplas en el oído y me haces eses entre las piernas
yo, lleno de ganas y hasta el cuello de deudas
siento una mezcla extraña
de última compañía,
de soledad primera.

ojos

ojos marrón mediocre, tirando a tristes.
ojos de café solo, y tres cubitos de hielo (buscate tú las metáforas).

ojos iguales a los que ayer lloraban,
ojos secos,
ojos que tiritan de alegría, que tiritan llenos de lágrimas.

ojos hinchados de amanecer, de no haber dormido en tres días,
ojos que miran una sombra volver,
ojos fatiga.

ojos de arruga y de impermeables,
de grietas y venas en la pupila,
de cruces cruzadas en la mirada rota a dos copas y una chica.

ojos marrón mediocre, tirando a tristes.

ojos buscandose entre la gente,
ojos de encuentro y de olvido,
ojos rasgados por el filo de una palabra,
ojos heridos.

ojos que viven y esconden trocitos rancios de alma,
ojos que se mueren donde mueren las mañanas.
ojos que matan.

ojos perdidos mirando quien sabe donde,
ojos dolidos de rutina y embites,
ojos paisaje de humo y legañas,
ojos de tener ganas y perder siempre,

ojos de que no voy a volver a verte,

ojos estúpidos,
como dijiste que viste: ojos marrón mediocre, tirando a tristes.

se vende

8 millones de dólares.
podría decirse que no es tanto comparado con lo que otros piden para ser feliz.
he leído en el periodico que ese el precio de woodstock (escribase como se escribe).
a mí woodstock me da igual, pero a ella...
ella me ha puesto a ver en youtube ese festival tanto como yo a ella el gol de zidane en glasgow (cada uno toca la guitarra a su manera, no?).
y pienso que pisar esa tierra donde hendrix y joplin y los who...
pisar esa tierra y sentir todavía el eco de aquella vida, 4 décadas más tarde.
respirar ese aire.
y luego mirarla a ella, sentada en el barro, las piernas cruzadas, mirarla
y que ella no se dé cuenta.

woodstock, dicen los periodicos, está en venta.
8 millones de dolares.

zidane valió más de 60.

imagyn tonic (o el resto de la sinergia)

Es en lugares asítiuaciones como ésta lactitas
Donde el sentidomesticado del humor se queda un poquitonto
Y se queda bastanterao
Mientras nosotros juganamos perdiendo calor í así
Reinciprocidimos en hacernos cucos de nido
Y nudos zurdos de ideología obvia de cuerpos hipersonantes.

Mas es así y no podía ser de otra formatematica.
Y me nos es indiferente porque lo nuestro
Es decir abrapalabras
Entre calada y calada de vida.

Comodin moriarty,
Mary limon roe.

Es por es tertores que al existir van y se quieren.
Je, sus labios dicen que amor ni caso.

3 horascacielos de carretera y una noche de mar e hadas.

Coñocerte en algunas personas es dejarse llevaritas mágicas
Y usarlas como un dado en un don:
Privilegidos
Hijos de puta madre,
Destinacidos pa esto,
Ser es a prueba de vaginas en blanco
Y de “po ya sabes tú que no”.

Creemdma, please: yo me entiendo al sol,
Tu te entiendes a la luna,
Y el resto
Es lo que nos llevamos de más en cada suma. .

fumando en plata

Da cosa mirar 25 años de kilómetros a medias y juntos
o contar vuestra historia en formato cuento
con ese estilo de chica guapa de provincias conoce chico trabajador y listo
se enamoran
se casan 93 escalones después
y tienen dos hijos: altos guapos y fuertotes.

Da cosa, digo, este escalofrío de nostalgia que a veces entra por la razón
y otras por los sentimientos,
hablar de los dos es hablar de un camino construido con manos y piedras,
caricias,
guiños,
y demasiada distancia de esa que duele cuando toca dormir solo.

Ya me entiendes, supongo, que os miro las manos y están llenas de tierra,
de horas y horas de trabajo pringando al sol y a la luna,
arreglando un poquito este mundo jodido a cachos pero que a veces parece bonito
y claro, a uno le entra una media sonrisa de esas que salen como sin darte cuenta,
creo que estoy hablando del orgullo que me sale solo por la garganta cada vez que grito vuestro nombre
o cada vez que otros pronuncian mis apellidos.

Así que todo se podría reducir a una foto en la que cualquiera de los dos nos sostenéis en brazos,
o daros la mano por debajo de la mesa, y que ella diga “eres tonto” porque él
no deja de hacer tonterías para hacerla reír.

Es igual que cuando te pide un beso y tú
se lo das.
O si os ponéis a discutir por teléfono pidiendo tan solo una mirada de complicidad,
un punto de apoyo,
algo que os diga que sí que merece la pena.

Por eso estamos nosotros aquí, pa recordar
y recordaros
que cuando el viento no sopla a favor
y la carretera se pone cuesta arriba
y la vida se llena de espinas marchitas de rosas tiradas a un mar revuelto
vosotros seguís ahí dale que te pego
demostrando que curar a la gente no es cosa de medicamentos
sino de otra cosa
basada tal vez en esas pequeñas grietas que acumuláis poco a poco en los ojos,
25 años de idas, venidas, marchas, regresos y una familia con un peazo de alma a cuestas,
otras vidas al otro lado del mediterráneo,
25 batallas ganadas contra el olvido,
25 paraísos en las personas que tienen la potra de conoceros.




Por eso a veces me gustaría que el mundo os dejase en paz por un rato,
a vuestro rollo,
que os dejasen volar tranquilos mientras tomáis un café en una terraza,
o simplemente que hagáis lo que os dé la gana, joder, que os merecéis un palacio
donde papá haría los planos y lo llenaría de columnas todo,
de techos llenos de cuadros a lo miguel ángel,
de baños enormes con paredes de piedras macizas y ninguna sombra,
y mamá pues pasaría consulta a sus viejos, y pondría las manos en la garganta de algún joven mientras le dice “mucha fiesta la de ayer, eh?”
y después haría un masaje en el alma de la mala gente tarareando una canción de cuna
para que todos los niños del mundo puedan dormir tranquilos
y a gusto,
y por la noche hablaréis tirados en la cama, abrazados intuyo, desnudos de mirada pa dentro
mientras los sueños de cada uno pasan como ovejitas delante de un niño que mira juguetes pa navidad y en todos dice: me lo pido.

Os pido pa reyes, a papá y a mamá, y que sigáis juntos 25 tacos más
o lo que ustedes decidan,
porque la vida, y vosotros me lo habéis demostrado, está llena de héroes,
anónimos, sencillos como el regalo más especial,
como el pan que da de comer a una raza entera,
como una pareja que aguanta contra cualquier viento y cualquier marea,
como Fehmi y Pilar diciendo que no piensan rendirse,
que el amor es luchar
y por eso
ellos pueden ganar cualquier guerra.

papel mojado

sabes de sobra que tengo que terminar escribiendo en triste
porque es la mejor manera, así, de poder creer un poco en las letras
porque al menos ellas
no disimulan sonrisas de quita y pon
que nunca llegan más lejos que un teléfono sonando a un lado
y tú cerrando los ojos en el otro.

es mucho más fácil de lo que piensas dejarse caer entre palabras,
olvidarte tal vez,
volver a subir ciertas cuestas y eso que te juraste un día que nunca lo
volverías a hacer.

escribir de esta manera.

o despreciar detalles en destellos de mediocridad,
porque es mucho más estúpido hacer de ángel caído
que de estrella fugaz,
puestos a representar, digo.

me queda grande el papel desde el que te escribo.

y lo mismo es igual dos que antes,
que nada pase de largo y tú buscando algo a lo que aferrarte,
mejor ser distintos que distantes, con todo lo que eso conlleve.

porque no vamos a fingir que llueve cuando tenemos los ojos secos,

y las manos no nos duelen aunque así lo queramos,

y seamos nobles intentos de paisaje de un viernes,
de un septiembre al revés,

de muchos años izando velas
y soñando con naufragios.

jaulas y cadenas

ni tú has nacido para estar en una jaula
ni yo sirvo para llevar cadenas.

admito que hay noches frías como parpados llenos de maquillaje sin caricias
en que me caigo de entre tus sueños
y aparezco en un montón de realidades ajenas
y entre ellas no estás tú.

pero detrás de cualquier excusa
o a través del filo de la navaja que apoyo sobre mi cuello
para hacer equilibrios de vena con el futuro
y bailar claqué con las probabilidades,
después incluso de cualquiera de las otras piernas que no sean tuyas
siempre termino volviendo sobre tu sombra
pa preguntarme: y ahora qué?

porque es muy dificil saber...

esto no es una confesión de maldad por las cosas que no te digo
sino más bien todo lo contrario,
es un no querer hacernos daño queriéndonos,
que paso de contratos de exclusividad,
que me duele el personaje literario que me creo yo mismo en las barras de los bares
cuando te veo crear y yo tengo que callarme.

ya ves.
que quiero ser tu otra mitad, pero de forma que tú no cambies.

porque estoy dispuesto a dejarme llevar por todas las contracorrientes,
a saltar de cualquier precipicio,
a caer, si es que se puede, en el abismo de un buenos días, cariño,
voy a hacer el desayuno mientras tú finges que sigues durmiendo.

dispuesto a morir contigo en el próximo asalto.

y a veces me teñiré de oscuro,
de reproche inconsciente e instintivo,
de herida abierta que sangra para luego echarte en cara cantidad de mierda.

a veces no podré evitar ser una jaula.

pero tienes que saber que luego será por la mañana,
que las malas noches, las peores incluso, también se pasan,
que estoy impregnado de alevosía entre todos estos versos.

va a ser tan dificil que en muchísimas partes tendremos miedo.

y a pesar de todo eso, de que algunas lágrimas sí mojarán el camino,
y a veces nos buscaremos en esquinas equivocadas,
en labios distintos,
en un azar caprichoso donde solo tendremos la seguridad
de que ni tú ni yo vamos a cambiar nuestro molde
para ser un final feliz en el postre de un cuento.

y a pesar de que yo querré sujetarte cuando sea viernes y me alíe con el invierno...
...tendremos un barquito de piel con nuestros defectos bordados a mano y tirados por la borda,
con el viento en la frente y las alas desplegadas
y el secreto de elegirnos libres para volar sin cortarnos las venas

porque ni yo puedo quererte y ser una jaula a la vez,
ni tu vas a quererme si tienes que usar cadenas.

el vaho y esas cosas

cuando todos los minutos del contador van cayendo tan despacio que hasta un silencio pasa deprisa
y tu dejas el portafotos hacia abajo,
te desatas los cordones,
suspiras y al hacerlo sientes un sabor añejo en el aire
y vas conociendo el mundo,
las piedras
y todos esos paisajes que clasificas después
pero que olvidas antes,
y pruebas a beberte otra cerveza a ver qué pasa,
o solo pretendes cambiar de sitio,
de lugar,
de vida,
como si los caminos tuvieran forma de interrogante
y tu sombra no desapareciese con tanta facilidad,
igual es que no sabemos de qué manera celebrar esta elegía
o que nos cuesta romper a reirnos porque llorar es mucho más fácil.
en general todo resulta triste entre letras
pero te juro que me encanta este sabor a mezcla de resaca y abismo
que paladeo cuando trago saliba.

cuando, sin darte te cuenta, un día te ves entre el vaho y la gente
lamiendote tus propias heridas
piensas: no es tan malo,
porque todo empieza, pero nada termina.

idealisto

antes llegaban las 5 de la mañana y en lugar de pornografía elegía esta pagina para contar algo sobre mí mismo, bastantes mentiras en su mayoría, alguna verdad, camuflada siempre, a veces puesta en un mercado de palabrería barata que ni siquera he logrado tragarme tras tantos intentos.
no es que tiemble por miedo a las cosas, es que me muero.
nada que a ti no te ocurra tampoco.
he tratado de seguir impulsos nerviosos y rastrear rastros inconexos de ideas como rostros que se repiten uno tras otro en un mismo sueño y yo solo quiero que se conviertan en ovejitas.
pero la caridad, cuando es complacencia, es igual que un insulto en silencio contra uno mismo.
y no venía a contar el cuento de siempre pero a cachos me leo y es que ya me sé de memoria,
sé que seguramente empezaré la siguiente línea con un supongo
y supongo que luego vendré con eso del por eso
y es por eso que no hay un "así que" que concluya este razonamiento aunque yo siempre lo escriba
y "deriva" es la primera palabra que me viene a la mente
y después
poesía de plático en embalaje para sentimientos precociandos echos a máquina de triturar emociones.
es decir: un verso cualquiera dentro de huevo kinder sin chocolate.
o tendría que escribir unas cuantas cartas que debo, tres mensajes a personas de este foro, miento, más, rendir cuentas a 6 euros la hora de vida que pierdo antes de lo que el tiempo me gana,
dos folios que pedí una vez para dejarlos en blanco,
un cobertizo ilimitado de libertad,
unos labios, rojos, por los que mataré siempre,
o tal vez sea volverme a juntar con los sueños de entonces aunque yo no sea el mismo,
me duele la garganta cada vez que lloro
y los ojos cada vez que grito,
o sino probar de nuevo al método antiguo de la masturbacion en cadena y cerebral
donde todos piensan que piensan y solo es un bucle que se repite (481516...) en cabezas consumidas por el alter ego de lo que querrían ser ellos mismos.
no decirlo en voz alta, pero pensarlo.
no me da igual,
pero poco a poco veo de cada idea
un espejismo.

hombros

hay formas y formas de agachar la cabeza
y muchas maneras de asimilar un pasado
en la mirada de cada uno.

el viejo santi se quita la grasa de las manos
y aguanta las lágrimas de cada tarde,
de los ultimos 45 años
mirando una carretera que se alejó de su vida
en abril del 62, cuando las grandes ciudades
todavía
eran ciudades de provincia
y los sueños de los chavales de 20
eran, también todavía, posibilidades.

Es como entender que todos tenemos derrotas y traiciones
y un antes del después que es ahora,
aunque sonrías y sea lunes
y te abraces a la tristeza con una canción de fito.

Inés colecciona te quieros en el cajón de su mesilla
y le duelen las costillas a la altura del pecho
cada vez que él llora por ella
y ella no siente nada.

Pablo se vuelve loco dentro de su cabeza
y olvida a veces por qué empezó a tocar la guitarra.

Es agachar la cabeza y decir las cosas con la voz muy
muy baja.

Como una nota clavada en la pared desde hace 8 años
cuando amar era un juego de niños
para mayores.

Quiero decir que al menos siempre nos queda vomitar.

Y te cuesta frenar cuando es el hombro de marta el que te sostiene
porque tú ya no puedes con tanta bebida
y tantas recaídas una tras otra.

Paula ya no mira a los ojos de la gente
porque alguien le dijo una vez que podían verse siluetas desnudas llorando
y eso es algo
que a paula, sin querer, le duele.

Volar raso es demasiado parecido a caminar, y tú tienes alas.

Yo siempre me caigo.

O vuelves la mirada después de un escaparate
y todo tiene que ver con el vértigo que provoca vivir demasiado
aunque sea el rostro de otros el que siempre cambia,
y tú... tú siempre te mientes.

Así que joaquín se frota las manos
y es un gesto contrario a lo que guarda por dentro,
y tiene un miedo visceral al cártel de salida de su pueblo
porque sabe que más allá perderse es la única opción posible.

Secretos puestos en filas que esnifamos como si nos fuese la vida en ello.
Me río,
la vida...

El lado oscuro del rostro pálido de virginia nunca da la razón a su nombre
y ella se sigue buscando en un lavabo, cuando a los 17 todavía era una niña
y ahora ve que ya no puede.

Y miguel bebe cerveza en un chat que cada vez sabe a más a gasolina
a pesar de que ya ni se acuerda de que era ayer cuando tenía 30
y todavía un futuro por delante.

Javi solo escribe poemas que Patricia lee, sin saber por qué, cuando es martes y trece.

Y nada depende de nosotros salvo esta intentona de acostumbrarnos a vivir de errores,
ponernos a salvo de todos esos que nos venden la perfección en bandeja de plástico
como si fuese plata.
Todos te juzgarán...
...por sus temores
así que entiendes que todos miran hacia atrás en cuanto les das dos segundos de pánico,
que todos guardamos tachones entre las poesías,
que todos lloramos de vez en cuando
y siempre
sin venir a cuento.


Y yo me duermo sobre la arena soñando que las sábanas son el mar,
y siento a todo un planeta bajo mi vientre,
conectado a la vida del dejarse llevar mientras olas van
y vienen,

se van
y no vuelven.

manos de seda

continuación de mis brazos llenos de tierra
y la madre de todos los seres en mi boca
y la saliva haciendo huellas de besos en pieles de todos los colores
damos vueltas a la vez
y no ves que nacimos en el mismo sitio
y también en distintos paraisos
saltamos de casilla en casilla jugando a los dados con el destino
hacemos malabarismos con el desierto
y fingimos ser oceano en mitad de una tormenta tropical
partida por la mitad de una guerra que otros quisieron
pero nosotros no
y así
seguimos entre todo este asfalto
mientras dejamos nuestra piel en cumplir años
y olvidamos que hay motas de polvo de nuestros antepasados en el aire que respiras
en la vida posada de una montaña a medio construir
y en unas palmas que acompañan el latir de flores nacidas entre algodón
hierba creciendo más allá de las miradas
y en las lágrimas de la gente trocitos de mar imperfecto
sentimientos de más
y un te echo de menos que al final seguro que no es para tanto
porque aquí están
presente y pasado haciendo un castillo de arena para el próximo futuro
que vendrá con la próxima luna llena
y será
algo así como vivir bailando
o como un vals y una velas y un velero y una veleta y una vanidad muerta
junto a un arbol que es el arbol de las cervezas
brindemos pues
porque nacer nos permite hacer esto
y vendrán otros
claro que vendrán
dispuestos y dignos a robarnos la dignidad
que nunca quisimos
pero todos sí querrán.

si te dicen que caí

te pasas la vida esperando cumplir sueños
y luego
solo se hacen realidad las pesadillas.

cuento
con los dedos de mi mano
mis fracasos
y también mis recaídas.

ultimamente me hago más daño en cada intento.

sonreir es un esfuerzo.

hay tantas calles vacías donde podría caerme muerto
cualquier día...

...y sin embargo

hago de corazón tripas

y de ideas poesías.

"te dicen que duermo de día
y es verdad
y es verdad
no te olvides que soy grande porque tengo multitudes que me esperan afuera,
y si te faltó ternura
o la vida te hizo dura
quiero que me perdones...
no tuve los pies en la tierra
confundí la realidad
me olvidé de los amigos
me olvidé de los demás
reconozco haber perdido sintonía alguna vez
pero no te dejé de querer...
sigo siendo un varón tierno que quiere seguir de pie
pero te espero...
no son horas de reirse
no son horas de olvidar
hiciste lo que quisiste
de verdad
no sientas ni un segundo más de lástima por mí
que me voy a levantar
y si te falta una imagen quiero que me recuerdes así:
con el viento en las velas..."

M en la cabeza

son deseos que te has jurado que vas a cumplir
y luego
no lo haces.

un mensaje en un buzón de voz a las 8 de la mañana,
el cuerpo lleno de M y yo soltando palabras que trataban de ser,
algunas,
verdades y las otras
intentonas de mentiras,
porque mi vida, y esto ya lo sabes, se basa
no tanto
en tratar de ser valiente
sino al menos no llegar a ser un cobarde.

y nadie me dijo que fuera fácil
pero yo lo creía así.

por eso javi se deja los días y una costilla a medio romper
y una chica por la que daría una vida
y pili solo quiere reirse aunque a veces no la dejen
y por eso cris se mete coca cada vez que se la ponen delante.

las cosas duelen, amigo, cuando te sientas en el aparte de una fiesta
y te quedas dormido con el ruido de fondo,
ese sudor de gentío y yo no te llamo para decirte
que te sigas dejando los dedos en esa guitarra,
que el verano aprieta y en la noches,
lejos, muy lejos de las grietas,
vivo entre tus revueltas y mi botellón.

o dos pastillas de valium seguidas mirando fotos de chicas en top less,
buscar de nuevo la tinta entre el tinte oscuro de una ruvia,
dejarme caer tras una ola que me iba a llevar a la orilla
y me llevó la resaca.

un despertador que apenas me despierta ultimamente
viene a decirme que más alla de la tierra firme
y de las firmes promesas
hay muchas más maneras de vivir,
y entre todas está ésta.

así que yo también me voy cansando de la poesía
y jerry gonzalez que toca
jerry gonzalez que esconde su ira y su muerte detrás de una trompeta
y una chica en minifalda se mueve
y yo hago relojes de arena con las manos
y envejezco con las piernas.

es muy difícil:
no llorar si llueve y no hay ojos donde poder mirarse,
o si es martes y no encuentras el paracaídas
y en la piel tienes cortezas en lugar de corazas,
la lepra puede ser un sentimiento
y hundirse es igual de fácil que jugar a un ahorcado
y perder.

saldré de ésta
pero me meteré en otras,
y no sé hasta dónde irá mi cabeza
ni si estaré por allí cuando todo ocurra:
no tengo miedo y a veces basta con eso,

a veces incluso noto notas que me suben por dentro
y podrían ser caricias para un cuento
en donde nosotros
seremos los protagonistas.

y yo qué sé

todo estaba presente aunque no quisieramos decir nada
como por ejemplo
que aquella noche jamás volvería a ser como cualquier otra
o que tampoco eramos tan distintos a como habríamos querido ser hace ya algunos años,
quiero decir que estabamos
de pie
frente a esa barra que nos servía naufragios a 3 euros la copa
y el camarero ponía rock and roll en español
y yo gritaba que eso también existía
y había alguna chica preguntando qué sueños servían a esas horas de la madrugada
pero como tantas otras
confundía sueños con pesadillas y ni siquiera se daba cuenta,
o nosotros éramos la mejor ruleta disponible para el último trago
porque quién no ha deseado morir alguna noche
si a cambio cambias cuando sea por la mañana
y hasta los folios se retracten de las cosas que nunca escribiste.

podría haber sido otra luna más en una ciudad dispuesta a bajarse los pantalones
pero la música era una forma de vida
y las ganas algo inevitable
aunque nadie pudiera detener el tiempo en el momento justo
antes
de decir adiós,
y después te quiero,
y después perdón.

así que asidos a una promesa
nos fuimos dibujando derrotas toda la noche
hasta que una copa nos sirvió la asfixia en bandeja de whisky
y no supimos hacer otra cosa que bailar borrachos.

nos dejamos un suspiro en cada duda imposible de resolver
y lloramos a la vez
cuando alguien dijo la palabra muerte.

te llamé entonces, recuerdas?
tenía miedo y estaba desnudo aunque tú no lo veías,
te dije "mi vida, esto qué es"
y no pude disimular el aliento de duda que escupí en ese momento.

no miento cada vez que afirmo
que
solo después de haber sido un intento de lo que quería ser

que contigo consigo ser lo que quiero
ser.

impotenusa

impotencia, sabes?
también es falta se sentido del humor cuando escribo,
incapacidad para unir realidad con absurdo y esa facilidad que conozco
en personas que guiñan el ojo a la primera esquina con quien cruzan la mirada,
perder con aplomo las ganas revueltas
mientras rebelo mis rebeldías en una baraja de cartas marcadas
ahora que todavía no estoy borracho.

el hecho de que la cosas que quieres se van quedando en el maletero
y tú lloras por robar más gasolina
y luego te vistes de libro para contar una historia más.

-todavía quedan historias?
-eso dijeron el otro día en el telediario
-buenas noticias?
-mentiras, de las otras ya no quedan.

impotencia, sabes? porque tengo que caminar mientras todo se aleja
y aquello que me enseñaron en los libros de secundaria queda demasiado atrás.

tienes este montón de ideas en el cenicero
y te manchas los dedos imaginandote purpurina y day-glo en un cuerpo medio desnudo
y totalmente imperfecto,
sobrevives a otro día por desenvolver
e imaginas, o supones, que sería ser persona normal
si mañana amaneces con un cáncer.

toda esa gente a la que regalaste pedacitos de ti con una promesa de fondo
y que ahora suenan como acordes desconocidos en las canciones de otros.

soltar amarras y arrojarte por la borda en una especia de suicidio espiritual
porque a veces, a ciertas horas, sientes que tendrías que renovar tus sueños
o al menos intentarlo.

-cómo coño se hace eso?
-aqui sentado seguro que no.

impotencia, sabes? o la diferencia que hay entre alguien que tiene ese don
y otro que solo se obsesiona por tenerlo.
esa lucha que siempre es interna entre lo que serías si te dejaras ser
y la lógica racional que te obliga a cerrarte a razonamientos.

objetivos distintos
pero los mismos intentos, creo.

o saber lo que tendrías que hacer,
los pasos a dar, ya sabes,
y la impotencia que te asalta de noche cuando imaginas las otras vidas que ya no tendrás cuando decidas tirar palgun sitio.

-ese chiste que nunca terminas de contar...
-...no tiene gracia. se llama tragedia...
-y sin embargo
-nada, porque todo da igual, la única difrencia es que algunos deciden reirse al final y pese a todo.

tiras de lastre y miras a todas partes pero a nadie en concreto,
como si fueras un soldado primerizo en mitad de su primera batalla,
vaya, parece que esto no me lo contaron.

-y ahora que hago?
-nada, ya te lo dije, pero puedes reirte si quieres.

así que tú eres de esos que buscan
entre palabras algo que te descubra que con hablar no se cambia.

y algún sentido prohibido bastante desarrollado cuando todavía te escondías
para botellonear y huir de la policía si hiciera falta.

si hiciera falta...ganaría la partida, pero podría perder otras cosas.
ahora.
puedes controlar todo ese monton de lenguaje,
puedes incluso tener algo que decir,
y si vas más allá podrías llegar hacerlo
pero
el juego llega más lejos
y tú no vas.

no creer en la realidad te va a crear problemas de adptación.
ver chispazos de puntos de vista en algunos ojos no es tan raro como se piensa.

-hay personas que brillan, yo las conozco.
-y donde están.
-entre nosotros, disfrazadas de cualquier cosa para que tú las veas y no te asustes.

un último chute no más
"...que estoy cansá y no puedo con el corazón..."
un último chute no más, mi amor por favor,

y grito
porque te vas
y ya
no vuelves.

caricias y juguetones

esta especie de confesión sin ojos ahora que todavía somos diferentes
de los otros y también
esta forma de tenernos sin tener que lidiar excusas
ni secretos
más allá de volver a cogernos las manos con fuerza
y hablar en voz baja para que nadie nos oiga, ni siquiera nosotros.

de tantos trenes ahora contamos recuerdos por kilómetros
y por horarios,
vienes
a ciudades de provincia donde mi vida se corta por la mitad
entre los sueños del niño que era
y la certeza de lo que sea que intento ser,
me llamas para decirme que me quieres
y me quedo tan lejos de estar a la altura
que no solo trato de dar un paso más
si también puedo avanzar con saltos, entiendeme:

algo me sabe mal hacia dentro cuando me hablas de otros,
y se me ocurren versos crueles contra la humanidad más allá de que entienda
su fascinación por ti,
y de tus piernas mejor ni hablar, supongo,
ni del final que supone una risa y mi cara incapaz de asimilarte del todo,

que te voy a descubrir cada día es una puta verdad a la que no me acostumbro,
desnudos y así, no puedo evitar querer violarte al menos 10 veces en una mañana,
desconcentrarme y mucho cuando me hablas de las virtudes del resto,

tengo que aprender a vivir contigo sin esa parte de mí que solo cree en las exclusividades,
no me gusto si me cabreo porque alguien,
porque algo,
tú ya sabes y yo tampoco me quiero explicar,

y no da igual que yo tenga estas esquinas sin capacidad de aguante
porque luego eres tú la que me tienes que aguantar
y sé que nunca te lo pongo fácil,

por eso verás que a veces miro hacia otro lado
y pregunto menos
o sin más solo paso y llamo al día siguiente para decirte
ahora soy yo el que te quiero,

y luego te propongo emborracharnos
aunque tenga el riesgo de arriesgarnos las vestiduras.

nunca he estado preparado para esto
y poco a poco, cuerpo a cuerpo,
asimilo cada golpe en la batalla y te juro que aprendo:

solo se pierde si se juega con miedo,
y eso
es algo muy parecido a la vida.

el tío vang

se revuelve entre su silla un mendigueo de mentiras con las que poner algo más que tierra de por medio,
cenizas tal vez,
cualquier cosa que pueda dejar grabado "yo estuve aquí, mal que os pese"
mientras imagina el carajo de generaciones enteras dispuestas a no mirar mucho más lejos de su barriga.

tiene ganas de vomitar pero no es nada que no le ocurra demasiado a menudo.

y se mea en los pantalones pa consolarse con su propio calor,
suda muy frío mientras pulsa unos botones cualquiera
y se clava chinchetas, una a una, en el pecho para mirar sobre sí
una cortina de sangre.

todo le da un poco igual, incluso morir de éxito.

porque no es fácil resignarse a la verdad del olvido cuando nunca te ha dado por pensar en el futuro,
y tensa las cuerdas vocales conteniendo un grito que no llegaría demasiado lejos aunque no se hubiera cortado la lengua.

si me reviento el cerebro en mitad de la gran vía podría salpicar a unas cuantas personas, creo, y si fuese lo que otros fueron
venderían camisetas rojas con mi nombre en negro.

así que toma de diez en diez las pastillas, y se escribe una carta a sí mismo
para llenarlo todo de gasolina y alcohol, y se enciende ese puto ultimo cigarro de soldado vencido con la bandera en la mano
y tira su vida sobre unas letras que comienzan a arder
y a encender una mecha que va más despacio de lo que siempre había creído (ni para esto nos enseñaron, y sonríe por ultima vez)
después se pone serio, como en las fotos (con la boca cerrada estás más guapo),
firma un autografo en la escopeta de su tío (mira que somos cutres los españoles, y sueña un baile imaginario con una smith&wesson del 38
y luego, con sumo cuidado de no quemarse todavía, coge aquel cromo de aquel futbolista del real oviedo de la liga 95/96, lo pega con suavidad en la culata,
y les dice, o todos los que no estaba presentes pero sí pasados:
"vayanse ustedes a la mierda,
si es que pueden,
yo,
me voy con los gusanos"

y el tío vang
y se muere

lagrima entre humo

se levanta y con ella
hasta las motas de los restos de polvo que todavía quedan
y la luz
entran en un invierno de mes de agosto,
con todo un oceáno de su parte,
sin vaqueros,
vuelven a camuflarse como otra pareja más
aunque no lo sean
y las calles, oxidadas como siempre, no lo sepan todavía.

él dibuja papeleras en las esquinas
mientras subraya las grietas como se subraya algún verso:
a mitad de la pared
un te quiero baila baladas
y en un inglés tan peleón como el vino
viene a decirle
oh yeah, we are the same as yesterday
y entonces intuyen que todo podría ser,
hasta la osadía
de buscar un futuro en la piel de un cuerpo de otro.

y puede que sea el tocadiscos del mercado de los jueves
o la bandera de aquella revolución
o tal vez
la siguiente metáfora que se le ocurre mientras la besa,
ella se hace carmín
y le roza las heridas dispuesta a quedarse,
dice: "podrías haber pasado de largo
pero me ataste con el amago de irte",
y suena igual que el final de una película de los años 50,
aunque él no lleve gabardina,
aunque ella haya tenido que llorar de por medio.

un siglo después son sus manos las que recogen la misma arena,
cambiados de ropa pero no de isla,
con dos vidas y un castillo construido a los pies del mar,
con el "honestidad brutal" de fondo
y algún que otro paraíso escondido en la mirada,
vuelven a mojarse las ganas
y el corazón taquicardea secretos
como quien deja lágrimas entre el humo.

así, regocijandose de su propia risa,
deciden echar el resto a caballo ganador
y envidan la vida
a dos copas y un trago,
se la beben
mientras el tiempo,
borracho,
les va pintando las mismas canas.

understand me

una balada cotidiana de cualquier tarde
en que de golpe y porrazo (nunca mejor dicho)
están tus amigos
y se respira música
y yo desearía saber tocar la guitarra,
porque las imperfecciones de uno
a veces son tan limitadas que no sirven ni pa bajarse la bragueta
y en 6 cuerdas también se puede entender otra forma de vida.

quiero decir que juego al despiste pero siempre contigo
y que puedo sonar desafinado,
es posible,
en la boca de otras.

y cada noche es un nuevo rasgo,
un trozo de piel que no había descubierto,
un arma,
por cierto, que te mima las armonías.

o puede ser el revés en inglés de un te necesito.
algo así como
i can you love because i don´t need it
and that´s all...
...pero a cada segundo...
el mundo, ya sabes,
me pone de tu parte un poco más.

quería decirte la verdad:
ando detrás de un montón de puntos debiles
y pequeños detalles
con los que me he enamorado de ti,
y ser feliz tampoco es tan grave
aunque no lo entienda el resto del mundo
.

el chico de los rizos y el chupa chups

Cuando vine a Madrid a quedarme traía el principito entre las manos y durante los primeros meses lo dejé encima de la mesilla que había junto aquella cama ruidosa y lo leía las noches que dormía solo y pensaba en todo aquello,
Y antes de dormirme me decía: puedo ser mejor persona.
Tú y yo nunca, que yo recuerde, hemos hablado del principito, y tampoco sé muy bien por qué, pero ya ves, hoy tenía que escribirte esto empezando por ahí.
Un día, de golpe y sonrisa, apareciste por el foro de nuestros cojones y te pusiste a escribir poesías que parecían del 27, con ese dibujo a lo pájaro cantor que, como una vez ya te dije, me recordaba a un sugus.
“Dispuesto a quedarme entre los dientes” me respondiste de aquella, y yo entonces no te conocía pero lo entendí todo aquel día que panero vino por el bar y cruzamos un par de privados en una tarde y ni siquiera nos dio tiempo a leerlos.
Luego aquí nos miramos al acabar, y nos reconocimos igual que dos viejos amigos una vida después, como si antes, en cualquier otra parte, ya hubiéramos reído juntos y ya hubiéramos llorado.
Estaban patty y silvi (siempre están), y me acuerdo de cómo las mirabas, agachando un poco la cabeza como siempre haces, con la espalda un poquito encorvada, sonriendo de lado pero queriendo de frente.
Eso no es fácil, sabes?, querer de frente. A mí no me sale al menos. Pero con el tiempo y muchisimas cañas he ido aprendiendo que desde el silencio, hablando en voz baja, las estrellas lucen menos pero brillan mucho más.
Una vez apunto me quedé de llorar con el recuerdo de 20 minutos inmensos, que ese día, cuando lo escribiste, te habría invitado a 2000 cervezas, y lo digo muy muy en serio. O cuando te subiste a este metro cuadrado y dijiste en voz alta lo de vendetta en mayúsculas y me cagué en dios con la boca pequeña pero la frente muy alta. Que aun tengo en la memoria aquel amigo que te pidió unas monedas en el metro cuando tú ibas hacia vallekas. Que te sigo buscando en cada nueva letra para decirte que la vida es mucho mejor, amigo, si nos vemos de vez en cuando.
Por eso es genial que sigamos vivos y aquí, que monica te siga dando la mano, que el buckowski lleve tu firma en sus paredes.
Y bueno, ya he dicho que a mí de frente no se me da del todo bien, pero tienes que entenderme, porque llevo un tiempo callado, y me cuesta un huevo escribir, y tengo tantas cosas que decirte y decir sobre nosotros, sobre todo sobre ti, que nunca me atrevo y yo qué sé, joder, que si alguna vez escribo el puñetero largo que me ronda la cabeza, el prota sería vuestro hijo, de monica y tuyo, y me tienes que llevar en la furgoneta y enseñarme Madrid pero por abajo, a la altura de las piernas, ya sabes, y llenarlo todo de poemas un día de estos, quedarnos solo con las ojeras y las heridas, reírnos con arena en los pies y el mar y las putas olas de frente y nosotros construyendo castillos y destruyendo palacios, haciendo luchas de sumo, jugando a las películas como quien improvisa un cuento.
Todo eso, joder, y ser buenas personas, “buena gente” que es lo mejor que se puede decir de alguien.
No sabes con qué clase de orgullo escribo la palabra “hermano” para señalarte con el dedo, pero conoces a nur y supongo que te puedes hacer una idea.

el olvido y la muerte

tengo el problema de no tener dioses que me respalden la eternidad.

y miro hacia atrás mirando a esos hombres que nos firmaron
el prólogo de nuestra historia
y no consigo ver las explicaciones
a todos los miedos que sí me crearon.

vértigo de estar vivo,
el puto miedo a la muerte que me viene
cada vez
que no duermes conmigo.

digamos que tiemblo,
respiro mal
y hasta pierdo el equilibrio
si me acerco a un precipicio y compruebo que caerse
es mirar al vacío y ver que no hay nada.

no soporto la palabra infinito por todo lo que representa.

y cuando tú me abrazas,
a veces,
deseo solo
morirme a tu lado
y seguir así
y que sea siempre.

porque me duele cada minuto que muere,
y cada cacho de vida que paso,
y cada paso que doy

y cada miércoles...

imagino las cenizas de los muros que harán dentro de 50 años,
los cadaveres, inexistentes ya, de los niños del futuro,
la nada desplegando arrogante su poderío
y no habrá amantes que se piensen como nosotros
ni parejas oxidados de tantas años y tanta rutina,
ni siquiera habrá atascos para entrar en las piernas de la felicidad
ni ésta llamará a nuestra casa,
que será una hoguera donde todos los poemas que escribimos
se irán quemando
sin hacer ninguna forma especial con el humo.

me jode el olvido, porque vendrá a llevarse todo por delante
y entonces no importará si vivimos bien
o lo hicimos muy mal,
dará igual que ahora nos demos la mano como una forma particular de vida
o que ayer dijera "te necesito" hablando muy en serio.

nunca me han gustado las fechas de caducidad.
ni el hecho de que exista una cosa llamada tiempo
y encima avance.

quiero decir que dentro de 1000 poesías poco se va a quedar con nosotros,
que estaremos muertos y solos
como ejercitos de soldados rendidos y de rodillas,
llorando todos,
y la tierra se llamará gemido
y nadie estará pa decir que esto se parecía a un valle de lágrimas.

y olvidarán, cómo evitarlo, que un día nos hicimos caricia
y otro fuimos abrazo,
olvidarán -y no da igual, no me jodas-, lo que era dormir
y más aún, soñar,
entre el vértice de tu sonrisa
y la última grieta de tus párpado
s.

pause

un libro de Córtazar enla mejilla,
tres escondites perfectos pero imposibles entre las arrugas
que hay
entre la parte más débil de cualquier silencio
y tu sonrisa.
restos subreyados de ausencia para mañanas de junio sin ti,
cerveza en la ingle,
humo negro y ceniza deshidratada en la frente,
tres calaveras buscando nuevo continentes en tu espalda,
telarañas en la masa biscosa de tu cerebro,
un cuento de salinger recorriendote las arterias,
cinco planes de suicidio por acabar,
un personje que no terminas de desnudar nunca,
un paisaje lleno de folios en blanco,
el cadaver de tres utopiás junto a los pies de un niño que sangra,
un mensaje en una botella envasada al vacío de la noche de ayer,
un interrogante al final de todo,
el papel de fumar entre las manos,
restos de lluvia en la mirada,
montones de palabras haciendo juegos y abismos
y una desesperante incapacidad para contarte lo que me pasa
cada vez que falta el aire
y no te miro.

intiminiedades

y un ministerio de droga reparte jeringuillas con numeros impares para defunciones en vena a tiempo parcial,
y solo se puede morir un martes cuando eres pobre
y no tienes trabajo fijo, recibos a pagar antes de esta semana
y un culo abierto lleno de vaselina.

la policía se viste de esquina, de comerciantes,
de amigos chivatos espiatorios dispuestos a joderte la vida
el día que elijas quitar las rodillas del suelo
y decir algun insulto más alto que otro.

y los almarios se llenan de polillas satisfechas y gordas
y la saliva me sabe a azufre
y me da miedo que ella me vea llorar en cualquier momento
como si fuese así,
tan humano que parezco mediocre.

me tumbo en el suelo
antes de que ellos me tiren,
me escondo detrás de ti porque hay monstruos que me vienen siguiendo
y tengo jodidas las esperanzas
y nadie se levanta
tras la paliza de leyes que nos han metido.

por eso te beso cada vez que me dejas
entre palabras y tinieblas
nos agarramos
entre tristezas y nimiedades
me das la mano
entre frases y arpegios
nos lamemos las heridas
y las intimidades
y los dos entonces sabemos...

y hay días que nacen muertos
y niños que no nacerán y serán felices,
y gente ciega que dice sí con la cabeza y nadie les parte la cara,

y hay tanta indiferencia
que me quedo con tus piernas
antes que con todas las utopías de esta mierda de mundo.

paura (miedo)

http://www.digitalsextv.tv/2007/06/12/mirando-para-otro-sitio-sin-miedo/

aquí dejo el link donde está el video para el que se escribió esta poesía, paura (miedo).

Dicen que las gradas están vacías
de sexo retirándose por todas partes.
Respira,
gente amontonada en una sala de espera
y tranquila
porque perdimos nuestro lado más humano
el día que decidimos ser personas normales.

Sales a calles que son de otros,
a ciudades que se asfixian
entre la ceniza del diamante que eras
y la piedra del lado más torcido de la cuneta que te ha tocado.

Te buscas en trincheras ajenas
mientras el mundo graba solo una parte de lo que podrías llegar a ser.

Y ahora solo te abres de ojos
para no ver en lo que se ha convertido
el paisaje nonato de nuestra especie,
te resignas a soportar sus miedos
y lo que es peor, sus inseguridades,
mientras aguantas las lágrimas
porque no tenemos ni el derecho a estar tristes.

Te refugias en la parte de atrás de una zona vip para estrellas prohibidas de brillo
mientras besas motas de polvo
y secretos guardados en las heridas de personas solitarias.

Te tiemblan las piernas,
a veces,
también las ojeras
y en otras
te tiembla hasta el alma
mientras tú te sostienes en el filo de la aguja de un tacón.

Aprendiste
que lo que no se tiene
es porque no se desea
y nosotros, que vivimos felices a costa de pasar de ellos,
aun soñamos cada vez que tú sudas.

No nos importan tanto sus dudas como sí sus certezas
y tratamos de no hacerles demasiado caso
cada vez que nos dicen que no podemos.

La belleza
crece cada vez que respiras
y la vida
es un cuento para mayores de 18 años
protagonizado
solo por niños.

las cosas claras y el chocolate aceitoso

me cuesta aprender un nuevo lenguaje de signos
si lo que quieres es que siga haciendo malabarismos con la mirada,
colecciono cerillas muertas
y finales de cigarros todavía vivos,
miro montañas cuando no están de moda,
parloteo con las carreteras,
hablo solo,
me enfurezco tres veces antes de final de mes,
no sé ganar demasiado dinero
y mucho menos ahorrarlo,
trato de no hacerme caso cada vez que todos creen que tengo razón,
me pinto chorradas en los pantalones
y aunque tú nunca lo entiendas, también en los brazos
porque no tengo cojones a tatuarme nada que dure pa siempre.

me entra nostalgia un septiembre cualquiera desde que no tengo que empezar los cursos,
odio tener que empezar otro año a cada enero,
y otro verano cada junio si no sé lo que voy a hacer,
tengo calvas en las piernas
y en el estomago, escondida, la semilla de una tripa cervecera que ya veré cómo hacer
para que,
pese a todo,
también te guste.

puedo parecerte un niño si te pido, por favor, un orgasmo
y me abracadabro solo contigo
porque solo
no tengo ni puta idea de magia,
aun así sigo contando mis sueños como quien cuenta números romanos,
con letras X por todas partes,
y amanezco a las dos de la mañana como estés cerca,
y tengo la boca seca sin dos cervezas a las 10 de la noche,
y me mantengo al pie de un cañon cargado de poesía
porque si no
entre tanta mierda de día ya me ibas a decir tú si esta sonrisa es posible.

"se me nota lo feliz que soy" me parece una frase tan arrogante
que la digo siempre que puedo,
balbuceo en cada rotunda afirmación que hago
y creo
que el día menos pensado
podría robarte el perfume
y usarlo.

y también está, claro, una nueva forma impertinente
de decir que no
y decirlo muy alto
para que todo el mundo se entere,
está, claro,
el hecho de que ni tú ni yo estemos dispuestos a abrir la mano
y coger todos esos billetes,
y está, tan claro que no vamos a poder ocultarlo,
el hecho
de que temblamos de miedo
cada vez que nos hacemos los valientes.

amagos y tentativas

no creo que sea capaz de hacer ese museo de caricias en miniatura
de cuando tú te enciendes un cigarro
y yo trato de abrazarte antes del humo de la primera calada.

no pasa nada, me dices,
y puede que entonces solo piense
en todo lo que pasa contigo cerca,
cuando los restos de cada gesto que haces
me llegan apenas torcidos por el aire, todavía vivos
e impacientes de gritarle al mundo que nacieron de ti
una mañana
que parecía que iba a ser como cualquier otra.

tendría que llenar todo esto de faltas de ortografía
para así aproximarme al segundo anterior de haberte querido antes,

pero nadie lo entenderia.

será eso y que trato de expresarme lo peor posible
para que no descubras
que me guardo amagos y tentativas
en los bolsillos,
que te miro siempre
y que escribo esas cosas que escribe la gente que se sienta en los parques
con una libreta
y un poquito de tiempo.

digamos que me he enamorado de tus distracciones,
que a todo el mundo le digo que vivo en un paisaje pintando horizontes,
que tu culo
me sigue llevando por el camino de la amargura.

achico entre letras el hecho de ser unico responsable
pero te necesito, muy cerca, cada vez que me acecha una cotidianidad.

luego, cuando te vas,
me quedo palpando partituras al aire
y hasta los sueños se me quedan pequeños,
y en un folio, ya sabes, besarte es distinto
y más suave,
te acaricio con una palabra
y solo tengo que decir: libertad,

para que tú me entiendas.

por tales

lo asimilas igual que una cerveza, cuando ya queda poco
y sabes que no tienes monedas de más en los bolsillos,
entonces bukowski se convierte en tu mejor amigo por unos momentos
y tú siempre le llamas Jorge
y nunca le dices que le echas de menos cuando vas demasiado borracho.

miras de lado sin pedir auxilio
porque no está tan mal acabar esta noche
de nuevo perdido
como si quisieras no tener que encontrarte.

sonríes en la parte de atrás mientras sueñas con canciones en inglés que
no entiendes,
mark knofler tal vez,
y ella sigue durmiendo como si el mundo se detuviese a observarla.

dices te quiero en voz baja tratando de que nadie te oiga
porque a estas alturas de la tormenta
piensas que queda muy mal ponerse a descifrar sentimientos.

te ahorras un infinito en sus ojos de nuevo y te pides otra,
que ya verás cómo el dinero aparece solo,
un día de estos,
el que menos te lo esperes.

y te olvidas de todos los poemas que deberías escribir para poder besarla,
te olvidas de que mañana vendrá con su propia fecha de caducidad
y la certidumbre de no saber qué día te tocará morirte.

así que al menos te imaginas de viejo imaginandote volver a ser joven
y tirando segundas oportunidades por un suelo sucio
de día de lluvia y trincheras.

ya no esperas nada que no sea encontrar pistas nuevas en sus mejillas
o una llamada a las cinco y media
donde solo te dice que hacía frío en la última pesadilla de esta noche.

te dejas caer entonces, porque todos los portales tienen el mismo olor
que un palacio sin ella
y las estrellas no se ven en la retina de las grandes ciudades
y hace tiempo que bebes de la misma forma que olvidas,
sin querer
y también sin dolerte.

y así te quedas, a un paso de sortear la suerte,
tirando al aire monedas
de dos caras y una cruz,
jugando a las probabilidades con el destino
mientras, tú,
que te ibas a llevar la vida por delante,
llega ella
y te da por detrás.

accidente

NOTICIA RECOGIDA EN EL PAÍS DIGITAL.
Un muerto y 19 heridos en una colisión múltiple en Álava
El incendio de un autobús ha provocado un choque en cadena en el que se ha visto implicada una quincena de vehículos
AGENCIAS - Madrid - 24/05/2007
Un autobús de la línea regular que une Pamplona y Vitoria sufrió esta mañana una avería sin consecuencias que, a la postre, provocaría un choque múltiple en el que se vieron implicado hasta una quincena de vehículos y que segó la vida de una persona y causó heridas a otras 19.
El conductor del autocar, de la empresa La Burundesa, ha contado a Radio Vitoria como, tras arrancar de la parada de Salvatierra e incorporarse a la Nacional I, sufrió un problema mecánico. El motor, del que salía mucho humo, terminó incendiándose. Los ocho pasajeros que llevaba, "habituales" de la línea, se bajaron del vehículo, que luego quedaría completamente calcinado.
El autocar en llamas obstaculizaba en parte el carril derecho de la carretera, que estaba cubierta además por una densa niebla. Fue entonces cuando el conductor comenzó a escuchar golpes por detrás. Entre el humo negro del incendio y la niebla, los coches que venían por la carretera se encontraron de bruces con el vehículo y frenaron en seco, provocando un choque en cadena, según ha indicado la policía.
En total, 19 personas han resultado heridas, tres de ellas graves, y una ha fallecido en este siniestro, que ha tenido lugar a las siete de la mañana en la localidad alavesa de San Millán, cerca del límite con Navarra, según la policía autonómica vasca. Entre los 15 vehículos implicados hay cuatro camiones y dos furgonetas, así como coches de la policía. Los heridos han sido trasladados a los hospitales vitorianos de Txagorritxu y Santiago.
La carretera sigue cortada en dirección a Francia, lo que ha provocado atascos kilométricos. De hecho, en esta cola se ha producido otro accidente, con cuatro vehículos implicados pero sin heridos de consideración. La policía ha habilitado un desvío por la carretera comarcal A-3100 desde Olaona, desde la que, pasando por la comarcal A-3188 se accede de nuevo a la N-I pasado ya el accidente.

RELATO
Todos los días las mismas caras sentadas en los mismos asientos mirando las mismas puñeteras ventanas. Paisajitos verdes mojados por el agua, montañas que hacían babear a fotógrafos que no tenían ni idea de lo que era ver aquellos monumentos naturales día a día a día a día…
Tenía que haberme mudado a Vitoria, se decía en voz baja y a regañadientes, de haberlo hecho ahora no tendría que soportar al tipo ese calvo, el que siempre se sienta en el primer asiento, comentar que ayer el Liverpool jugó mejor y mereció la victoria, mientras el conductor, que es del athletic y se lo recuerda a todos todos los días, dice que el Milán es mejor equipo, con más oficio y no sé qué gaitas más. Tenía que haberme mudado a Vitoria, se volvió a decir, porque estoy hasta las pelotas de todo esto, de este autobús de caras rectilíneas y rutinarias, de tener que ir de una ciudad a otra y luego volver otra vez y así de lunes a viernes siempre, y algunos fines de semana.
Y toda esta mierda se solucionaría si hubiese cogido aquel piso que vio entonces, cuando tuvo que elegir entre la ciudad de su trabajo o la ciudad de su novia. “Dormiremos juntos todos los días, y no está tan lejos, y con un poco de esfuerzo todo saldrá bien y saldremos adelante”. Había dos chicas jóvenes que a diario iban, suponía, a la universidad, y por un momento pensó que tirarse a una de ellas sería una buena venganza personal, una especie de echarle las culpas a las consecuencias. Como otras mañanas, se puso a echar cuentas de todos los minutos de su vida perdidos en aquel asiento. Una hora tiene 60 minutos, empezaba el razonamiento, y yo llevaré aquí más de 100 horas, más de 200 tal vez. No sé, puede que incluso más. Y entonces le entraba como una rabia por dentro y deseaba, por su parte, que todo se fuese a la mierda. Empezaba a imaginarse playas enteras llenas de petróleo, y bosques ardiendo, y gente muriendo por todas partes. El cambio climático, pensó mirando a la lluvia, ojalá que estén en lo cierto y nos mande a tomar por culo, y toda esta gente y todos estos horarios huyan despavoridos pero vivos por una vez.
Cada vez se cabreaba más. Pensaba también en asesinos en serie y cómo podía entenderles desde ese asiento de ese autobús, cómo podía sentir esas ganas de matar y acabar con todo. Que ocurriese algo, lo que sea, aunque sea malo, muy malo, pero que por una vez ocurra, joder.
Y se encendió un cigarro. Lo hacía todos los días bajo el resguardo del último asiento y con todas esas caras ensimismadas apestando a rutina, mirando siempre a otro lado. Se encendió un cigarro y empezó a fumar y a respirar ese humo que era lo más parecido a la palabra reconfortante. Cuando creía que no podía más, se encendía ese cigarro y pasaba del mundo concentrándose solo en la próxima calada. Sólo en la próxima calada. Sólo esa. Y luego, después de expulsar nubes grises que se enredaban entre sus piernas, volvía a levantar la cabeza y mirar de nuevo el aburrimiento de aquel autobús.
Pero aquella vez aquella mujer le miraba. Y eso era algo. Imaginó que lo mismo se montaba un espectáculo en el autobús e incluso el conductor podría echarle, por fin, llamando a la policía o lo que fuese. Aquella mujer le miraba, aquella mujer que tendría unos 40, separada seguramente, con un crío mayor que ya pasa de madres, y un curro de mierda también limpiando portales o lo que fuera, quién sabe, a quién le importa, aquella mujer, de haber tenido nombre, se habría llamado Esperanza, se dijo, seguro. Y le seguía mirando mientras la cortinilla de humo subía por su jersey y hacía de prueba del delito. Entonces ella se levantó, y poco a poco, lentamente, se acercó hasta el último asiento y se sentó junto a él.
- ¿me das una calada? Por favor
Y a él le empezaron a temblar las manos porque ella le miraba a los ojos mientras cogía el cigarro. Le temblaban las manos y de golpe empezó a temblar todo y el autobús pegó un frenazo y el tipo calvo se cayó al suelo y el conductor comenzó a hablar por el altavoz diciendo que tenían que salir del bus, en orden y con cuidado, manteniendo la calma, despacio, y ella, que seguía con el cigarro, se levantó y bajó, y le miró como comprobando si él la seguía. Y claro que la seguía.
Abajo, los dos, se quedaron de pie junto a la carretera, mirando como ardía el motor primero, y después el autobús entero mientras ellos se pasaban el cigarro y soltaban humo, y los coches que venían detrás se estrellaban, y todo ardía entre la lluvia y las nubes negras, y ella entonces le cogió la mano y le dijo en voz baja
-Hace un día maravilloso.
Y él contuvo aquella vez, pero sólo aquella vez, las ganas de besarla.